¿Se estancan las redes sociales para la búsqueda de empleo?

A pesar de todas las ventajas y facilidades que han supuesto las redes sociales para la proyección profesional de las personas, parece que su utilización para la búsqueda de empleo se ha estancado. Según recientes estudios el 78% de los usuarios emplean estas redes, como Facebook, LinkedIn y otras,  para intentar encontrar trabajo, pero la cifra es exactamente la misma que ya se conocía del año pasado. Es decir que su uso se ha quedado congelado, no ha crecido en todo un año.

Se habla de cierto efecto fatiga al respecto. O quizá es que se tuvieran unas expectativas demasiado altas. Lo cierto es que el uso de las redes sociales por parte de las empresas para reclutar empleados ha bajado en un año 3 puntos, ya que ha pasado del 87% del año 2015 al 84% en 2016.

Pero no sólo es significativo este dato de descenso, es que además el 35% de los reclutadores no considera que los candidatos hagan un uso profesional de sus perfiles. Parece que la falta de motivación de los candidatos hace  que los currículum difundidos no tengan  todos los detalles que necesitarían para servir de verdad a sus objetivos de búsqueda de empleo y ser de verdadera utilidad para los seleccionadores de personal.

Todo parece indicar que la relación entre las redes sociales y el mercado de trabajo no pasa por su mejor momento y que necesitaría una revisión a fondo.

Las redes sociales derribaron las barreras de comunicación entre empresas y candidatos. La mayoría de empresas tiene redes sociales y las emplea para captar talento. Lo mismo ocurre con los candidatos: la mayoría tiene perfil abierto en redes sociales y lo utiliza para buscar trabajo. La situación parece ideal. Sin embargo la utilización de las redes para encontrar trabajo se ha frenado y, después de unos años de auge, se advierte cierta incomodidad por parte tanto de reclutadores como de candidatos.

También se considera que han bajado las expectativas de encontrar trabajo por este medio tan popular.  La recomendación de los expertos es que las personas que busquen empleo a través de las redes sociales deben aportar información concreta y valiosa sobre sus aptitudes, ya que la mayoría solo se centran en los años de experiencia y una poco pormenorizada relación de puestos de trabajo ocupados hasta la fecha.  Esto resta utilidad a los currículums, tanto para una parte como para la otra. Entre tantos millones de perfiles sería mucho más práctico y productivo intentar diferenciarse.