El 80% de las empresas españolas todavía no vende online

Tan solo el 19,6% de las empresas españolas de más de 10 empleados utilizaron el comercio electrónico para vender sus productos o servicios en el año 2017.

Esta es la principal conclusión del informe España Empresa Digital que elabora la Cámara de España. En la elaboración de dicho informe han participado nombres muy destacados el empresariado español, como Telefónica, Indra, Iberdrola, Orange, El Corte Inglés, Aena, BBVA o LaLiga, además de varios departamentos ministeriales.

Además, también revela que en el caso de las grandes empresas (de más de 20 empleados) el porcentaje de organizaciones que venden online sube hasta el 40,48%. Respecto a las microempresas (de menos de 10 empleados) el uso del comercio electrónico se reduce hasta el 4,95%.

Por otra parte, las ventas a través del comercio electrónico supusieron en 2017 el 17,3% del total.

Estos datos contrastan con el elevado uso del comercio electrónico por parte de la ciudadanía española: un 54,7% de los españoles con conexión a internet ha realizado compras online.

En opinión de Carlos López Blanco, presidente de la Comisión de Digitalización de la Cámara de España, estos datos obligan a las empresas españolas a realizar un esfuerzo para que la oferta se ajuste a la demanda.

El informe indica que las empresas españolas han cumplido satisfactoriamente la primera fase del proceso de digitalización, ya que han conseguido niveles de equipamiento y conectividad altos.

No obstante, cuando nuestras empresas pasan a un segundo nivel más complejo, que implica cuestiones como la utilización de software empresarial, no consiguen avanzar.

Otro aspecto que apunta el informe y que necesita mejorarse es la utilización de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) en sus procesos de compras y ventas dentro de las empresas. Solo un 30% declara utilizarlas con estos fines.

Según José Luis Bonet, presidente de la Cámara, las grandes empresas participan de forma activa de la digitalización pero lo que hace falta para avanzar es implicar a las pymes, ya que estas suponen el 99% de nuestro tejido productivo.

Por lo tanto, estas empresas deben entender que la digitalización no es una opción sino una condición necesaria para su supervivencia.

Para superar esta situación el presidente sugiere la colaboración público-privada fomentada por empresas y Administraciones, de forma que permitiera el impulso de la formación, sentar las bases de la transferencia tecnológica y ayudar en el aspecto financiero.