El futuro comercial de los drones

Estamos en una época de auge tecnológico en el sector de los drones, aviones pilotados por control remoto de pequeño tamaño y con muchas habilidades como realizar fotografías y vídeo desde gran altura, pero sobre todo extremadamente útiles en el reparto de objetos.

Es precisamente este último apartado el que más interesa para su futuro comercial más inmediato y, como no podía ser de otra manera, Amazon está más que volcada en ser la primera en explotar esta vía. Su objetivo es nada menos que utilizar drones para realizar envíos de pedidos en menos de 30 minutos desde que se han solicitado, lo que podría revolucionar todo el sistema de repartos del mundo, pese a que todavía es un sistema en pruebas.

Amazon lleva tiempo tras una idea vanguardista de este tipo. Solicitó a la Autoridad Federal de la Aviación de EE UU (FAA) utilizar aviones no tripulados para ello, pero la propuesta fue completamente rechazada. No obstante, a Amazon no es tan fácil decir que no. Si bien al principio amenazó con irse directamente de Estados Unidos para operar desde otra parte del mundo, ahora cuenta incluso con la atención de la NASA, ante quienes ha presentado su proyecto en una reciente convención celebrada en California.

La idea de Amazon para el futuro comercial de los drones es habilitar un espacio aéreo, una franja exclusiva de entre 60 a 120 metros en el espacio, donde podrán trasladarse los drones sin ningún tipo de problema.

De momento la idea ha gustado y se va a permitir a la empresa de mensajería con más ventas del país realizar las primeras pruebas en espacio sobre terrenos rurales, con el fin de evitar cualquier accidente. Hay que tener en cuenta que estos aparatos sobrevuelan a una distancia de entre 120 y 1870 metros del suelo y que pueden llegar a alcanzar una velocidad de 111 Km/h.

De ser un éxito, se espera que en pocos años estos drones o envíos robotizados alcancen cifras vertiginosas de cientos de miles de unidades no tripuladas. Es de vital importancia para la seguridad de todos que tanto su recorrido como sus posibles malfuncionamientos no representen un peligro para los ciudadanos. Pero, además, es todo un sector que nace en estos momentos y que puede atraer la atención de muchos inversores. De tener éxito, podría suponer una nueva revolución no sólo en el sector del transporte, sino en todo el ámbito tecnológico.