Ideas para mejorar el rendimiento del equipo humano en una startup
¿Tienes una startup o estás pensando en montar una? Tener una buena idea, que sea reamente innovadora y apoyarse en la tecnología es, sin duda, importante para conseguir el éxito. Pero eso no lo es todo. Hay cuestiones tradicionales, algunas tan viejas como el mundo, que debemos tener muy en cuenta si no queremos fracasar: nos estamos refiriendo al trabajo en equipo, a la selección y a la organización de dicho equipo, a su motivación, a las relaciones interpersonales dentro del contexto laboral, y a la filosofía que da aliento a todo ello.
Puede parecer sencillo o complejo, según se mire, pero el descuido en estos ámbitos relacionados con el personal no nos va a reportar nada bueno. Por lo tanto, aquí van una serie de ideas o consejos para mejorar el rendimiento del equipo. Ni mucho menos son todos los que se pueden dar pero conviene tenerlos muy en cuenta:
Un equipo está formado por profesionales
No por amigos. Mezclar la amistad y los negocios puede ser peligroso. Mucho cuidado, siempre hay que ser capaz de delimitar la barrera entre un contexto y otro.
Motivación para los profesionales
Para que los profesionales que vas buscando se integren en tu startup debes ser capaz de motivarlos. Para ello, tu proyecto no debe tener fisuras. A veces la recompensa económica superior pasa a un segundo plano cuando un profesional de verdad se encuentra cara a cara con un proyecto atractivo, sólido y motivador.
No prometer jamás lo que no se pueda cumplir
Esta es una máxima que debería regir la vida de todo individuo. Lamentablemente, no es así, y en contextos empresariales, menos. No tener un plan de trabajo claro y confiar en que las cosas se arreglarán con el tiempo, podrá suponer el incumplimiento de objetivos fijados que puede llegar a desmoralizar a tu equipo. Y lo peor es un equipo dolido y desmotivado.
El equipo debe estar comprometido con los objetivos
Una persona que trabaja motivada rinde siempre más. Si el equipo comparte tu visión y tus objetivos, tiene la oportunidad de expresar sus opiniones y se siente reconocido y valorado, aumentará el grado de compromiso y estará motivado incluso cuando los beneficios o los objetivos se hagan esperar.
Forma un equipo heterogéneo
No caigas en el error de montar un equipo a tu imagen y semejanza. Si los perfiles son demasiado parecidos a ti, estarás limitando las posibilidades. Lo ideal es que el equipo esté formado por personas dispares, con perfiles, experiencias e intereses distintos que enriquezcan el conjunto. El reto es conseguir un equipo dispar y heterogéneo a la vez que polivalente.
No pretendas ser el más listo ni compitas con tu equipo
La inteligencia se compone de muchos factores, nadie es el más inteligente todo el tiempo. No tengas miedo de integrar a tu lado a personas brillantes. Tu trabajo es coordinar el equipo, marcar las líneas, liderar el proceso, pero nunca competir con tu equipo. Anima a proponer ideas y quita importancia a las equivocaciones.
Tomar decisiones, despedir
Si alguna persona no cumple con el trabajo de forma reiterada y demuestra incompetencia por falta de integración en el equipo o de falta de aptitud, lo mejor es prescindir de sus servicios. El líder de una startup, un emprendedor debe saber tomar estas decisiones por dolorosas que resulten.
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